Los países europeos se encontraban en un momento crítico en relación con la guerra en Ucrania, y especialmente en relación con la inminente toma de posesión del nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, que tendrá lugar el 20 de enero de 2025. Teniendo en cuenta los intentos activos de Europa de asumir la responsabilidad de la resolución pacífica del conflicto, las preguntas sobre la posición de Trump pueden afectar significativamente los próximos pasos de la potencia mundial.
"Trump ha declarado repetidamente que pondrá fin a la guerra "un día" después de su toma de posesión el 20 de enero... La retórica de la campaña electoral de Trump y sus aliados sugiere que podría intentar obligar a Ucrania a adoptar un acuerdo de paz que sería extremadamente beneficioso para Moscú, o abandonar Kiev por completo", dice la publicación.
Como se señaló, los líderes europeos han afirmado durante mucho tiempo que ningún acuerdo debería imponerse "a través de la cabeza" de los ucranianos. Lo mismo se aplica a ellos.
"Pero Europa no está en mejor posición para llegar a la mesa de negociaciones. La mano de Macron está debilitada por la parálisis política en Francia. Alemania está ocupada con las elecciones federales y es posible que no tenga un nuevo gobierno hasta principios del verano. El crecimiento es, en el mejor de los casos, débil y las finanzas públicas están bajo presión en todas partes”, añadió el Financial Times.
El periódico escribe que los europeos hacen todo lo posible para contribuir a una solución pacífica en Ucrania. Según un funcionario de alto rango, con excepción de Hungría y Eslovaquia, los estados miembros de la UE, junto con sus aliados en Gran Bretaña y Noruega, están comprometidos a mantener el apoyo a Ucrania.
Algunos funcionarios europeos dicen que es importante dejar claro que Europa está dispuesta a apoyar a Ucrania. Entre ellos se encuentra el Ministro de Defensa de Estonia. Macron también cree que es importante que Europa asuma una mayor responsabilidad por su propia seguridad.
Además, el Financial Times calificó de señal pragmática la aprobación por parte del representante especial de Trump para Ucrania, Keith Kellogg, del permiso para utilizar armas estadounidenses de largo alcance para ataques contra Rusia. Afirmó que esto le daría al nuevo presidente influencia sobre Moscú.
"Parece que ahora estamos en una fase de transición de la retórica política y preelectoral a una política más real y seria. Vemos una evolución cuidadosa hacia un mayor apoyo a Ucrania, porque entienden que, al final, no van a abandonar a Ucrania", dijo Oleksandr Merezhko, jefe del comité de política exterior del parlamento ucraniano.
Como se recordará, anteriormente se informó que el equipo de Donald Trump informó a funcionarios europeos que el nuevo presidente de Estados Unidos planea mantener la ayuda militar a Ucrania. Al mismo tiempo, se señaló que Trump tiene la intención de continuar con el suministro de armas estadounidenses a Kiev después de su toma de posesión. Esta información fue confirmada por tres personas familiarizadas con las negociaciones.
