Los líderes de la UE prometieron apoyar a Ucrania "tanto como sea necesario". Pero, a pesar de las duras declaraciones, el bloque todavía carece de una "bazuca económica" que permita eliminar la evidente brecha entre las ambiciones geopolíticas y la realidad en Europa, que durante años ahorró en defensa y resultó ser demasiado dependiente de Estados Unidos, escribe. Bloomberg Lionel Laurent.
Según él, los europeos saben que tienen que "hacer las paces". Sin embargo, los cuellos de botella en la producción, la fragmentación de la industria militar y las limitadas finanzas estatales ralentizan el proceso. En particular, los proyectiles que Francia puede producir en un día se agotan en cuestión de minutos en el frente ucraniano.
Dentro de Europa, todavía existen profundas divisiones sobre cómo resolver exactamente los problemas que enfrenta. Mientras el presidente francés, Emmanuel Macron, habla de "economía militar" y amenaza con enviar tropas a Ucrania, Alemania y otros países "ahorrativos" se oponen a la posible dispersión del capital financiero y político, señala el autor del artículo.
La UE necesita crear un fondo único de inversión en defensa por un monto de aproximadamente 100 mil millones de euros. Pero, aparentemente, Europa no va a dar ese paso todavía y tal vez se dé cuenta plenamente de su situación sólo después de otro mandato de Trump, piensa Laurent.