Ucrania sigue sintiendo las consecuencias de las acciones militares de Rusia, en particular en lo que respecta a la infraestructura del sector energético. Recientemente se supo que la central térmica de Burshtyn (TES) no puede restaurarse después de los ataques con misiles de las tropas rusas.
Esta información fue confirmada por la jefa de la administración civil-militar regional de Ivano-Frankivsk, Svitlana Onyshchuk, durante la transmisión de la estación de radio "West Pole".
"Más de 12 ataques con cohetes fueron dirigidos contra nuestra instalación energética. Todos los servicios funcionaron en todo momento. Pero desde hace algún tiempo entendemos que la central nuclear de Burshtyn no se puede restaurar, está muy dañada", dijo el funcionario.
Según ella, la cuestión estaba dirigida al gobierno, el Ministerio de Desarrollo Comunitario, Territorios e Infraestructura de Ucrania.
"Hoy tenemos un acuerdo sobre la asignación de seis salas de calderas para Burshtyn: cuatro de megavatios cada una y dos de ocho y diez megavatios cada una. Estas salas de calderas podrán proporcionar servicios sociales y a nuestra población", dijo Onyshchuk.