Durante la ley marcial, unas 50 personas que intentaron cruzar la frontera ilegalmente murieron en el tramo fronterizo al otro lado del río Tisza. Así lo anunció el portavoz del Servicio Estatal de Fronteras de Ucrania, Andriy Demchenko, en el aire del teletón, señalando que muchos de ellos acudieron al médico con hipotermia debido a la forma peligrosa de cruzar la frontera.
Según Demchenko, los intentos de cruzar ilegalmente la frontera a través de los ríos, en particular a través del Tisza, no sólo están relacionados con la violación de la ley, sino que en repetidas ocasiones terminaron en tragedia. "Observamos que entre ellos hay personas desesperadas que eligen la línea fronteriza que corre a lo largo de los ríos, intentan cruzar estos obstáculos de agua nadando o utilizando embarcaciones", dijo el representante de la guardia fronteriza.
También señaló que tales intentos a menudo conducen a hipotermia y otros problemas de salud graves. El Servicio Estatal de Fronteras identifica periódicamente a estas personas brindándoles asistencia médica; sin embargo, lamentablemente, muchas no tienen tiempo para recibir la asistencia necesaria.
La elección de ríos para el cruce ilegal de fronteras, en particular como el Tisza, es extremadamente peligrosa. "Este es el mayor riesgo para la vida y la salud de las personas, porque los ríos de montaña pueden estar muy fríos y sus corrientes pueden ser fuertes, lo que aumenta la probabilidad de que se produzcan tragedias", enfatizó Demchenko.
El río Tisza se ha convertido en el lugar de numerosos intentos de fuga al extranjero, que ya han provocado importantes víctimas humanas. Esta situación resalta la importancia del control fronterizo y la necesidad de ser cautelosos ante tales extremos en la búsqueda de seguridad.
Los guardias fronterizos advierten que los intentos de cruzar ilegalmente la frontera a través de obstáculos de agua pueden ser fatales. Piden a los ciudadanos que tengan cuidado y recuerdan que cruzar ilegalmente la frontera no sólo es un delito penal, sino que también pone en peligro la vida y la salud de quienes lo intentan.