Según el fiscal general de Ucrania, Andriy Kostin, durante el período comprendido entre el 30 de diciembre de 2023 y el 7 de febrero de 2024, Rusia utilizó al menos 24 misiles balísticos de producción norcoreana durante los ataques con misiles en el territorio de Ucrania.
Estos ataques resultaron en al menos 12 ataques dirigidos a siete regiones de Ucrania. Lamentablemente, como resultado de estos ataques, 14 civiles murieron y más de 70 resultaron heridos.
El Fiscal General subrayó que el alcance máximo de lanzamiento de estos misiles es de hasta 650 kilómetros y tienen un diámetro mayor que los modelos similares de producción rusa y soviética.
La precisión de estos misiles deja mucho que desear, señaló Kostin. De los 24 misiles disparados, se conocen dos impactos relativamente precisos: un misil impactó en la refinería de Kremenchuk y el otro en la zona técnica del aeródromo de Kanatovo. El resto de los cohetes impactaron a gran distancia unos de otros, hasta varios kilómetros o más, o explotaron en el aire, o provocaron la destrucción de zonas residenciales en Járkov.