En Odesa, agentes de la Oficina Estatal de Investigación han desarticulado una trama destinada a sabotear el proceso de movilización. En el centro de la estafa se encuentra la comisión médico-militar del Centro Territorial de Reclutamiento y Apoyo Social del Distrito de Primorsky.
Según informó "Law and Business" citando a la Oficina Estatal de Investigación, los médicos de la comisión emitieron informes médicos falsos para los reclutas sin su presencia. Dichos documentos permitieron que los reclutas obtuvieran ilegalmente una exención del servicio militar.
Según la investigación, los miembros del VLK actuaron en connivencia con los participantes en una trama de corrupción a gran escala previamente descubierta por la Oficina Estatal de Investigación. El acuerdo fue organizado por un residente local que involucró a un empleado del Centro de Apoyo de Servicios del Ministerio de Defensa y del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania, a un empleado del Centro de Cooperación y Seguridad Primorsky y a dos intermediarios.
Por el "servicio" de evadir el servicio militar, los empresarios exigían 16.000 dólares a los reclutas. Las acusaciones contra los organizadores ya han sido presentadas ante el tribunal.
Actualmente, cuatro miembros de la comisión médico-militar son sospechosos de falsificación oficial cometida por un grupo de personas en una conspiración previa (artículo 28, apartado 2, y artículo 366, apartado 1, del Código Penal de Ucrania). Los investigadores están considerando su destitución.
La sanción prevista en el artículo contempla una pena de hasta tres años de prisión.

