El Ministerio de Cultura y Política de Información de Ucrania (MKIP) ha anunciado la inclusión de la tradición de preparar y consumir "repollo cubierto" en la Lista Nacional de Elementos del Patrimonio Cultural Inmaterial de Ucrania. Esta decisión resalta la importancia de este plato culinario tradicional en el contexto cultural del país.
Esta tradición sigue viva en los pueblos de Ruda, Hnizdychiv, Oblaznytsia, Livchytsia, Hanivtsi, Pokrivtsi y en las ciudades de Stryi, Zhydachiv, Zhuravno y Khodoriv del distrito de Stryi de la región de Lviv. En otras partes de Ucrania se preparan platos similares, pero tienen sus propias características.
Para preparar el plato se necesitan productos frescos: repollo, mijo, cebolla, aceite, leche, crema agria, champiñones y carne. Aunque no existe una receta unificada, la tecnología de cocción tiene características comunes. El chucrut se hierve hasta que esté medio cocido, se escurre el agua. Luego agregue la leche y deje hervir. A continuación, se añaden los granos de mijo lavados y se cocinan hasta que estén tiernos.
A continuación, derretir la mantequilla en una sartén, picar finamente la cebolla y añadirla a la mantequilla. Cuando la cebolla se vuelva transparente, agréguele crema agria casera y cocine a fuego lento durante 5 minutos, revolviendo. Luego se agrega al repollo y se mezcla. Si el repollo está demasiado espeso, puedes agregar un poco más de leche. Algunas amas de casa, después de retirar el plato del fuego, ponen encima ramitas de cereza o grosella y lo dejan un rato para que el plato se impregne de aroma. Los chicharrones y la salsa de champiñones se preparan por separado y se sirven con repollo relleno.
El "repollo cubierto" más sabroso y fragante es el que se prepara en el horno o en el horno. Los secretos de una deliciosa col rellena son los productos de alta calidad y una cocción adecuada, además conviene dejar el plato en infusión después de la cocción para que los sabores se combinen mejor. La cultura de comer repollo relleno no es sólo una forma de comer, es una forma de vida. El plato se preparaba para bodas, funerales, días laborables y festivos.
Según la leyenda, el "repollo sucio" era el plato favorito de Ivan Franko, y también amaba al hetman Ivan Vyhovskyi, el metropolitano Andrey Sheptytskyi, Ivan Nechui-Levytskyi, Mykhailo Kotsiubynskyi y Olga Bachynska. A Solomiya Krushelnytskyi también le agradaba.