En Kiev, uno de los mayores escándalos relacionados con el robo de fondos presupuestarios está en marcha. La detención del subdirector del Departamento de Salud de la KSCA Gennady Lepsky se convirtió en solo el comienzo de un importante caso penal, en el que los funcionarios de alto riesgo de la capital, así como sus cómplices en las autoridades públicas.
Según los milicianos, el vicepresidente de la KSCA interpretó el papel clave en el esquema del robo de fondos presupuestarios de la KSCA, un curador de la Política Social y Veteransky Marina Hona. Según los investigadores, controlaba personalmente el robo de dinero asignado para que la atención médica se enfermara gravemente. La cantidad del crimen es UAH 149 millones, algunos de los cuales fueron robados.
Los fondos diseñados para proporcionar cuidados paliativos para pacientes se asignaron a 55 mil hryvnias al mes para cada paciente. Sin embargo, de hecho, los pacientes recibieron solo 5 mil, y el resto del dinero fue para comprar autos de élite y bienes raíces para los funcionarios. Uno de los autos, el Porsche Cayenne, que estaba formalmente registrado para el transporte de personas gravemente enfermas, en realidad utilizó a las personas involucradas en el caso. Este automóvil, junto con otros activos, se convirtió en parte del enriquecimiento ilegal de funcionarios de alto riesgo.
Los atacantes concluyeron un contrato por valor de UAH 149 millones con un contratista, pero un tercio de esta cantidad fue robado en lugar de gastar dinero en la compra de medicamentos, atención médica y alimentos para pacientes. Esto ha causado graves consecuencias para la atención médica, lo que tuvo que proporcionar personas gravemente enfermas y causó resonancia pública generalizada.
Actualmente, las sospechas han sido planteadas por cuatro participantes en el esquema criminal. Esto incluye al subdirector del Departamento de Política Social Lyudmila Riyako, Galina Dovganchin (quien anteriormente administró los programas y adquisiciones específicos del Departamento de Estado en el Ministerio de Salud), así como a Gennady Lepsky. Este último, además de su participación en el robo de fondos, también aparece en el esquema con la compra de automóviles rápidos a precios inflados.
Además, se descubrió que uno de los acusados del caso, el propietario de un contratista, recibió injustamente la discapacidad del Grupo 2, que le permitió evitar la movilización, viajar al extranjero y recibir pagos de jubilación a expensas del presupuesto.
Los cuatro sospechosos están actualmente bajo investigación, y están amenazados con hasta 12 años de prisión bajo tumbas del Código Penal de Ucrania, incluido el robo de fondos presupuestarios y abuso de cargo.
La investigación está en curso, y los resultados de este caso dependerán de si los ucranianos podrán ver cambios reales en la medicina, donde el robo de fondos ya se ha convertido en una ocurrencia común para algunos funcionarios.