En la Rada Suprema se ha vuelto a intensificar el debate sobre el proyecto de ley que allana el camino para la proscripción de la Iglesia ortodoxa ucraniana.
Después de que la comisión parlamentaria de política humanitaria y de información adoptara la decisión de recomendar a los diputados del pueblo que apoyaran el proyecto en su conjunto, los lobbystas del documento comenzaron a exigir que se sometiera a votación lo antes posible. Además, la oposición a Zelensky, el partido del ex presidente Petro Poroshenko, "Solidaridad Europea", se esfuerza más que otros, a pesar de que el proyecto de ley fue iniciado por el gobierno de Denys Shmyhal. Sin embargo, a pesar de los llamamientos de "Eurosolidaridad" y de otras facciones y grupos adjuntos que se les han unido, las autoridades no tienen prisa por actuar.
En el contexto del proyecto de ley, cabe destacar el revuelo que provocó una carta dirigida a la Rada Suprema del asesor jurídico de la UOC, el conocido abogado estadounidense Robert Amsterdam, socio del bufete de abogados Amsterdam & Partners LLP. En él, el proyecto fue llamado "la intervención gubernamental obvia más grande en la libertad de religión en la historia europea moderna".
Si el proyecto de ley se aprueba, Amsterdam advierte que su equipo "trabajará para garantizar que se impongan sanciones y otras consecuencias legales a quienes permitan este ataque".
Además, hablando de sanciones, Amsterdam mencionó la Ley Magnitsky, que prevé la introducción de medidas personales y está en vigor en Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá y varios otros países.
El principal comité "humanitario" encargado del proyecto de ley reaccionó con nerviosismo ante la carta. El jefe del comité, Mykyta Poturaev ("Siervo del Pueblo", SN) lo calificó como "una injerencia absolutamente sin precedentes en los asuntos internos de Ucrania y una presión sobre los diputados del pueblo y la dirección de la Verjovna Rada". Junto con sus colegas, tiene la intención de recurrir al SBU, para que éste, a su vez, se dirija al FBI estadounidense para pedirle que comprenda la "base de la actividad" de Amsterdam. Y el comité exigió que el proyecto de ley fuera llevado a la sala de sesiones.