Tras su triunfo sobre Tyson Fury en diciembre de 2024, Oleksandr Usyk no solo consolidó su estatus de campeón, sino que también aumentó significativamente su patrimonio neto: su fortuna ya se estima en más de 214 millones de dólares, según el portal GiveMeSport.
La histórica revancha entre Usyk y Fury, que tuvo lugar en el Kingdom Arena de Riad, no solo fue un evento deportivo, sino también un récord financiero. El ucraniano no solo retuvo los títulos de peso pesado de la WBA, el WBC y la WBO, sino que además recibió una de las mayores sumas de dinero de su carrera.
Los analistas de GiveMeSport han incluido a Usyk entre los cinco boxeadores más ricos de todos los tiempos. Según la publicación, ganó cerca de 100 millones de dólares solo por su segunda victoria sobre Fury.
Arabia Saudí, que en los últimos años ha invertido fuertemente en eventos deportivos internacionales, ha transformado radicalmente el panorama financiero del boxeo. Gracias a los contratos saudíes, las peleas de los mejores boxeadores generan ganancias récord, y los combates de Usyk se han convertido en uno de los ejemplos más claros de esta tendencia.
Resulta especialmente impresionante que el ucraniano haya amasado su fortuna en tan solo ocho combates de peso pesado. Y aunque Usyk ya tiene 38 años y probablemente le queden pocos combates importantes, cada vez que sube al ring se convierte en un acontecimiento financiero de proporciones internacionales.
El combate contra Daniel Dubois, que terminó por nocaut, también le reportó al ucraniano un cheque multimillonario. Gracias a la combinación de deportividad, victorias constantes y contratos lucrativos, Usyk se convirtió, naturalmente, en uno de los boxeadores más exitosos y ricos del mundo.

