El conocido periodista estadounidense y columnista del diario The New York Times, Thomas L. Friedman, criticó duramente al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tras su decisión de cambiar el nombre del Departamento de Defensa a "Departamento de Guerra" y una serie de publicaciones en las redes sociales.
Friedman afirmó que tal comportamiento socava la autoridad de Estados Unidos y demuestra la falta de seriedad de Trump al abordar la agresión de Vladimir Putin. Sugirió con sarcasmo cambiar el nombre de la Casa Blanca a "Waffle House" para enfatizar la vacilación del líder estadounidense.
«"Nuestro presidente suena como un bloguero adolescente, no como un líder del mundo libre", escribió el periodista, reaccionando a las palabras de Trump sobre "la violación del espacio aéreo polaco por parte de Rusia".».
Friedman enfatizó que Trump está ignorando en la práctica una comprensión fundamental del papel de la OTAN como la mayor coalición de democracias y del Estado de derecho. También llamó la atención sobre la falta de un proceso de formulación de políticas en la actual administración:
«No hay indicios de que las declaraciones de Trump estén siendo revisadas por expertos del Departamento de Estado o de la CIA. Sus publicaciones son improvisaciones personales, no una estrategia estatal.».
El columnista advirtió que las demandas de Trump de imponer aranceles contra China o prohibir la compra de petróleo ruso por parte de Europa parecen populismo y no la obra de un líder responsable.
Friedman criticó especialmente la fórmula de Trump: «Esta no es mi guerra. Es la guerra de Biden y Zelenski». Según el periodista, tal retórica es peligrosa, porque el presidente estadounidense elude el hecho principal: fue Putin quien inició la agresión.
" Lo siento, señor presidente. Esta es su guerra. Porque sólo usted puede proporcionar a Ucrania los recursos para detener al Kremlin ", enfatizó Friedman.
Añadió que si Trump permite que Rusia gane, pasará a la historia junto al primer ministro británico Neville Chamberlain, símbolo de la política de apaciguamiento de Hitler.
En este contexto, los líderes europeos reafirman su compromiso con Ucrania. El canciller alemán, Friedrich Merz, advirtió que un acuerdo en los términos de Putin solo lo impulsaría a tomar nuevas medidas agresivas. Y el presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que 26 países habían acordado enviar o financiar fuerzas de paz para garantizar la seguridad de Ucrania.
