En Kiev, los agentes del orden expusieron a un grupo organizado de personas que creaban una escasez artificial de billetes de tren internacionales a Europa y los revendían a precios inflados. Según informó la Policía Cibernética, los atacantes obtuvieron acceso no autorizado a las cuentas de los pasajeros, compraron billetes para vuelos populares y crearon una imitación de escasez. Posteriormente, las entradas se vendieron a través de las redes sociales, obteniendo una ganancia varias veces superior a su valor real.
La gran demanda de viajes en tren a Europa, así como el número limitado de billetes, provocaron la aparición de un mercado "negro", donde los estafadores tenían la oportunidad de beneficiarse de la reventa de billetes. Los agentes del orden encontraron a cinco personas involucradas en este negocio criminal y llevaron a cabo una serie de registros en Kiev y la región de Kiev, incautando equipos informáticos, dispositivos, tarjetas bancarias y una gran cantidad de billetes.
Según la investigación, los atacantes actuaron a través de canales de Telegram y otras plataformas online. Revendieron billetes a destinos internacionales, lo que provocó una considerable indignación entre los ciudadanos que no encontraban billetes al precio habitual.
Según la Policía Cibernética, se han abierto procedimientos penales en virtud de los artículos 190 (fraude) y 361 (interferencia no autorizada con sistemas automatizados) del Código Penal de Ucrania. Dado que estos crímenes se cometieron durante la ley marcial, los perpetradores se enfrentan a hasta 15 años de prisión.