En Nikolaev, la contrainteligencia de la SBU detuvo al agente del Servicio Federal de Rusia (FSB), quien transfirió información sobre la seguridad de la posición de las Fuerzas de Defensa de Ucrania. El agente era un hombre de 35 años con un pasado criminal, reclutado mientras estaba en una colonia en Rusia. Sobre la tarea de la FSB, llegó a Nikolaev y comenzó a recopilar activamente información sobre la ubicación del ejército y el equipo ucraniano, transmitiendo estos datos a través de un teléfono móvil.
Como el agente llegó a Nikolaev
Antes del comienzo de una guerra a gran escala, la persona ya tenía problemas con la ley. Después de que los invasores rusos se apoderaron de Kherson, fue transportado a una de las colonias en Rusia, donde fue reclutado por servicios especiales rusos. En la tarea de la FSB, llegó a Nikolaev, comenzó a recopilar información sobre las posiciones del ejército ucraniano. Para hacer esto, fotografió objetos y hablando con el local, tratando de obtener sus datos. Pasó toda la información recopilada a través de su teléfono móvil a su curador.
Detención y eliminación de evidencia
El personal de SBU detuvo al agente durante una búsqueda en su lugar de residencia, donde un teléfono móvil fue eliminado por evidencia de contacto con el curador ruso. Gracias a las medidas operativas del personal de SBU, el espía se terminó temporalmente y la posibilidad de pérdida entre el ejército ucraniano logró prevenir.
Calificación legal y perspectivas
Los investigadores de la SBU informaron al atacante sobre la condena en virtud del artículo 114-2 del Código Penal de Ucrania, la difusión no autorizada de información sobre el despliegue de las fuerzas armadas en las condiciones de la ley marcial. Para esto enfrenta hasta 12 años de prisión. También se resuelve la cuestión de la calificación adicional de sus acciones como traición estatal.
Esta operación especial es otro paso en la lucha contra el espionaje ruso, que continúa amenazando la seguridad nacional de Ucrania.