La Policía Nacional de Ucrania está investigando un caso sonado relacionado con las actividades de uno de los centros territoriales de reclutamiento y apoyo social (TCC) en la región de Ternopil.
Los empleados de uno de los TCC secuestraron y golpearon a hombres, exigiéndoles sobornos para evadir la movilización.
El plan fue organizado por el jefe de la comisaría militar. Involucró a tres subordinados y un exmilitar. Los miembros de OZU extorsionaban a los ciudadanos entre 100.000 y 150.000 dólares al mes.
Se exigía dinero incluso a aquellos que no tenían derecho a recibirlo legalmente. Como ejemplo, pusieron la historia de un hombre que es padre de cuatro hijos.
Irrumpieron en su casa por la noche y comenzaron a golpearlo y luego se lo llevaron con dirección desconocida. Fue puesto en libertad sólo después de que sus familiares pagaran 30.000 grivnas por él.