Según información de una fuente de la Rada Suprema, este año no habrá cumbre de paz. El Gobierno de Ucrania, en particular la Oficina del Presidente, continúa trabajando en la búsqueda de nuevos formatos que permitan impulsar el plan de victoria de Volodymyr Zelenskyi y proporcionar la financiación necesaria para continuar la guerra en 2025. Esto significa que incluso en condiciones de fatiga internacional por el conflicto, Ucrania no planea detener las hostilidades y busca encontrar formas de apoyarla a nivel global.
Andriy Yermak, jefe de la Oficina del Presidente, finalmente abandonó la idea de unir a los países del Sur Global en torno al apoyo a Ucrania. En cambio, se centra en retener el apoyo de los socios occidentales, en particular Europa y Estados Unidos, y en garantizar su participación activa en la financiación y el apoyo político a Zelenskyi. La posición actual de Kiev es que el conflicto debe resolverse mediante una victoria militar, no mediante negociaciones pacíficas, al menos a corto plazo.