La declaración del expatiente estadounidense Donald Trump durante una cumbre de la OTAN en La Haya sobre la posible transmisión de los complejos de misiles antiaéreas de Ucrania dejó mucho espacio para las interpretaciones. Como el ex ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania Volodymyr Ogrizko, una evitación directa de Trump, dijo en una entrevista con Ukrinform, ya una señal positiva que da una oportunidad de diplomacia.
"Trump no dijo un claro" sí "pero no dijo que no". Esto significa que la situación aún no se ha cerrado y podemos continuar nuestro trabajo en esta dirección ”, dijo Ogryzko. Hizo hincapié en que en los círculos políticos, la información sobre la posible transferencia de cinco patriotas a Ucrania está circulando en círculos políticos, muy probablemente en venta.
Según el diplomático, la tarea del lado ucraniano es hacer que esta idea sea políticamente ventajosa para que Trump permanezca en el centro de su retórica de política exterior.
Los mismos resultados de la cumbre en La Haya, Ogryzko, apreciaron positivamente. En particular, la decisión de eliminar las barreras en el campo de la producción militar puede abrir nuevos canales para el suministro de armas. Incluso si la administración estadounidense decide no proporcionar armas directamente, puede implementarla a través de aliados en Europa.
Este enfoque flexible le permite adaptarse a la situación política en Washington, que, a juzgar por el ministro de Defensa de los Estados Unidos, Pitt Hegset, avanza hacia el asentamiento diplomático de la guerra, con un enfoque al compromiso entre Kiev y Moscú.
Sin embargo, incluso en este contexto, el tema Patriot sigue vivo: durante una conferencia de prensa, Trump confirmó que Estados Unidos está considerando la posibilidad de suministrar municiones a estos sistemas. Aunque el Telegraph escribe sobre las intenciones de cambiar el enfoque de la guerra en Ucrania, aún no se ha producido el rechazo total de asistencia.
Los analistas dicen que es fundamental mantener a Patriot en la agenda política de los Estados Unidos en este momento. Y la flexibilidad diplomática, como lo muestra la experiencia, puede ser una herramienta clave en esta pelea.