Después de las declaraciones del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, sobre la restauración del "acuerdo de cereales" con Ucrania, el problema de las exportaciones agrícolas volvió a pasar a primer plano. Por un lado, la renovación del acuerdo es importante para los agricultores ucranianos que necesitan mercados para sus productos y, por otro, cuestiones urgentes que siguen sin estar reguladas en Ucrania pueden amenazar la economía nacional y socavar la confianza en las instituciones estatales.
Problemas fiscales y empresas fantasma
Últimamente se está llevando a cabo en Ucrania una investigación sobre el impago de impuestos por parte de las empresas que exportan cereales a través del puerto de Odesa. En particular, se trata de TOLANS LLC, LIVION LLC, INTEGRA LIGHT LLC y MENTI LLC. Resultó que estas empresas utilizan complejos esquemas para evitar la devolución obligatoria de impuestos, lo que provoca pérdidas importantes al presupuesto estatal.
Por ejemplo, LLC "TOLANS" y LLC "LIVION" no solo tuvieron problemas con el registro de informes financieros, sino que también estuvieron involucradas en numerosas manipulaciones con empresas ficticias. Como mostró la investigación, estas empresas cambian a menudo de nombre y de propietario, además de utilizar direcciones y datos ficticios, lo que dificulta su seguimiento y control.
Los grandes volúmenes de cereales que pasan por los puertos de Odesa suelen ser objeto de discusión debido a numerosas violaciones de las normas aduaneras y fiscales. La investigación reveló que muchas de estas empresas utilizan "empresas fachada" que compran cereales a los agricultores pero no pagan los impuestos adecuados.
Estas empresas a menudo se caracterizan por una falta de producción real o de tierra, lo que aumenta el riesgo de que sean ficticias. Los casos en los que estas empresas obtienen beneficios de 100 grivnas en un año o incluso operan con pérdidas no hacen más que confirmar las sospechas sobre su actividad.
Después de firmar el anterior "acuerdo de cereales", Ucrania enfrentó muchos problemas. Los agricultores que no pudieron vender sus productos debido a las restricciones a las importaciones en Polonia, Rumania, Hungría, Bulgaria y Eslovaquia enfrentaron protestas y graves dificultades económicas. Al mismo tiempo, los organismos estatales no pudieron garantizar adecuadamente el control de las exportaciones, lo que tuvo consecuencias negativas para la economía del país.
Los problemas con el control aduanero y la posibilidad de evasión fiscal a través de empresas fantasma no sólo causan pérdidas al Estado, sino que también socavan la confianza en el sistema. Los casos de exportación de cereales a través de esquemas para eludir pagos aduaneros, y en los que empresas con historiales financieros dudosos continúan operando con impunidad, revelan debilidades sistémicas en la gobernanza y la supervisión.
Merece especial atención la situación de Oleksiy Fedorychev, un empresario ruso propietario de TIS-Zerno LLC y TIS-Mindobriva LLC. A pesar de las sanciones impuestas dos veces, Fedorychev sigue ganando dinero activamente con el grano ucraniano. Según datos oficiales, sus empresas obtuvieron importantes beneficios incluso durante el período de sanciones, lo que plantea dudas adicionales sobre la eficacia del régimen de sanciones y el seguimiento de su aplicación.
En Ucrania, Fedorychev no sólo está registrado como propietario de empresas, sino que también impugna activamente las sanciones ante los tribunales, lo que pone en duda la eficacia de tales restricciones.
La situación del mercado de cereales ucraniano requiere una respuesta urgente de las autoridades estatales. Es necesario garantizar un control estricto sobre las empresas que exportan, mejorar los sistemas de control y prevención de la evasión fiscal. Además, se debe realizar una revisión exhaustiva de las actividades de los empresarios sancionados y sus empresas.
Es importante que los organismos estatales no sólo luchen activamente contra los esquemas existentes, sino que también impidan el surgimiento de nuevas empresas de compensación que puedan dañar los intereses económicos de Ucrania. Para ello, es necesario fortalecer la interacción entre las aduanas, las autoridades fiscales y las estructuras de aplicación de la ley, garantizar la transparencia de los procesos y aumentar la eficacia del control en todas las etapas, desde la exportación hasta la recaudación de impuestos al tesoro estatal.
La economía y el sector agrícola de Ucrania necesitan mecanismos de protección confiables contra esquemas de fraude y corrupción que pueden socavar su estabilidad y crecimiento.
