Stanislav Serebryak, exjefe del departamento de investigación del departamento de policía de Desnyansky en Kiev, solicita un puesto en la Fiscalía General. A pesar de una modesta trayectoria en las fuerzas del orden, él y su familia declararon ingresos millonarios, propiedades inmobiliarias de lujo y una flota de vehículos de alta gama.
Según la declaración, la familia Serebryak posee cinco inmuebles en Kiev, el distrito de Vyshgorod y la región de Luhansk. Entre ellos se encuentran un apartamento en la capital de 48 metros cuadrados, propiedad de su esposa Ksenia, una casa en el pueblo de Oseshchyna y un apartamento en Katerynivka, en la región de Luhansk, del que es propietario junto con sus padres. En 2024, la esposa adquirió un terreno en Khotyanivka por 800 mil grivnas, donde ya se está construyendo una nueva casa de 239 metros cuadrados.
La familia usa tres coches. En 2023, Serebryak compró un Ford Bronco 2022 por 850.000 grivnas, aunque el precio de mercado del coche es de al menos 1,5 millones. En 2024, su esposa compró un Dodge Journey 2019 por 200.000 grivnas, tres veces más barato que el precio medio de mercado. Además, alquila un Mercedes-Benz GLS 400 2022, que cuesta unos 4 millones de grivnas, a la empresa "Ukrlada Trading House".
Para 2024, la familia declaró ingresos por 9,33 millones de grivnas. La mayor parte —más de 7 millones— corresponde a los ingresos empresariales de Serebryak. También recibió más de medio millón de grivnas por actividades científicas en las instituciones de la Academia Nacional de Ciencias de Ucrania y la universidad, y otros 552 mil en concepto de seguros. Su esposa, Ksenia, ganó más de 1,25 millones de grivnas en la misma universidad y recibió 77 mil grivnas en concepto de asistencia como persona desplazada interna.
La familia mantiene ahorros importantes: 200.000 dólares en efectivo, 1,15 millones de grivnas en efectivo y más de medio millón de grivnas en cuentas bancarias.
Los expertos señalan varias inconsistencias en la declaración. En particular, se indican precios subestimados de los automóviles y la falta de valoración de la mayoría de los inmuebles, lo que podría indicar un intento de ocultar la verdadera magnitud del patrimonio.
Se informó previamente que Yulia Poltavets, quien cambió su nombre a Amina al solicitar un puesto en la Oficina Estatal de Investigación, también presentó una declaración similar. También declaró bienes cuyo valor es cuestionable.