En la noche del 31 de mayo, tropas rusas dirigieron cinco misiles guiados S-300/S-400 disparados desde la región de Belgorod de la Federación Rusa hacia Kharkiv. Como resultado del bombardeo, un edificio residencial de cinco pisos quedó destruido. La tragedia se cobró la vida de cuatro personas y 25 resultaron heridas, entre ellas dos niños. Es posible que todavía queden seis personas bajo los escombros.
Así lo informó el jefe de la OVA de Járkov, Oleg Sinegubov.
"Uno de los cohetes impactó en un edificio residencial de cinco pisos, como resultado de lo cual las estructuras del tercer al quinto piso de una de sus entradas quedaron completamente destruidas. Se produjo un incendio en una superficie de 80 metros cuadrados. Los bomberos rescataron a 6 personas, entre ellas un niño, de la casa en ruinas."
Sinegubov informó que hasta esta mañana habían muerto cuatro personas. "Desafortunadamente, en la casa destruida se encontró otro cadáver. Hasta el momento hay cuatro muertos", afirmó.
Añadió que entre las 25 víctimas se encontraban dos niños: un niño y una niña, de 12 años.
Además, como resultado de los repetidos bombardeos a las 00:15, un camión de bomberos y una ambulancia resultaron dañados. Además, un hombre nacido en 1959 murió como resultado del impacto de un misil en el territorio de una empresa civil.
Otro impacto se produjo en un edificio administrativo de tres pisos.
Según Volodymyr Tymoshko, jefe del Servicio de Seguridad Nacional en la región de Kharkiv, el enemigo utilizó una táctica de doble ataque para infligir el mayor daño.
Se informa que 6 personas más podrían estar bajo los escombros. Continúan los trabajos de emergencia y rescate en el lugar del edificio residencial destruido.