El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó a su representante especial para Ucrania, Keith Kellogg, que desarrollara un plan para poner fin a la guerra en Ucrania en un plazo de 100 días. Así lo informó The Wall Street Journal , citando fuentes de la administración presidencial.
Donald Trump, que acaba de comenzar su mandato como presidente de Estados Unidos, ha identificado un rápido fin de la guerra en Ucrania como una de las prioridades de su administración. Encomendó al Representante Especial Keith Kellogg 100 días para lograr la paz.
Keith Kellogg, un general retirado, desempeñará un papel clave en las negociaciones, pero es probable que el compromiso diplomático real con Rusia esté fuera de su ámbito. Las fuentes dicen que Kellogg ha desarrollado un plan para poner fin a la guerra, pero el control del proceso seguirá en manos de Trump.
Según The Wall Street Journal, llegar a un acuerdo con Vladimir Putin puede ser más difícil de lo que Trump anticipó. Durante la campaña electoral, afirmó repetidamente que pondría fin a la guerra antes de asumir el cargo.
El exasesor de seguridad nacional John Bolton criticó el nombramiento de Kellogg. Señaló que Trump lo eligió por su obediencia, no por su independencia de opinión.
"Simplemente hará lo que Trump le diga que haga. Puede protestar, pero no tiene influencia", dijo Bolton.
Los antiguos colegas de Kellogg destacan su experiencia militar, pero enfatizan que nunca participó en la diplomacia. Esto puede convertirse en un factor crítico en el proceso de negociaciones con Rusia.
Los expertos advierten que el enfoque de Trump podría generar presión sobre Ucrania para que haga concesiones a Rusia. Bolton enfatizó que es poco probable que Kellogg se convierta en una barrera para la influencia de Putin.