Oleksandr Sokolovskyi, director de la Asociación Ucraniana de Empleadores de la Industria Ligera y propietario de empresas de producción de uniformes militares, acusó públicamente a la Fiscalía de Holosiiv de un caso de comisión en su contra. Afirma que el fiscal Oleksandr Shapovalov y el policía Volodymyr Nikonenko forman parte de un plan elaborado con la participación del ex diputado del Ayuntamiento de Kiev, Serhiy Kotvytskyi.
Sokolovsky describe la situación como un ejemplo clásico de redada apoyada por las fuerzas del orden. Según él, el caso se refiere a los edificios abandonados del antiguo campo de pioneros en las afueras de Kiev, donde se planeó un nuevo proyecto. Según Sokolovsky, el ex diputado Kotvytskyi intentó intervenir en este proyecto con la propuesta de hacerse cargo de la empresa, construir en su lugar una ciudad rural y colonizarla por metros cuadrados.
Después de que Sokolovsky rechazó la oferta, la fiscalía abrió una causa penal. Pronto el objeto fue puesto a la venta por agentes inmobiliarios y, según Sokolovsky, este anuncio se convirtió en la base de una investigación. El fiscal Shapovalov supuestamente encontró "accidentalmente" este anuncio y lo utilizó para presentar un caso contra el empresario.
La situación empeoró cuando las sospechas se trasladaron al director de la empresa y al socio de Sokolovsky y se programó una audiencia judicial para determinar una medida preventiva. El fiscal ofreció una fianza de 23 millones de grivnas para cada uno de los acusados.
Sokolovsky cree que tales acciones destruyen el clima empresarial en Ucrania y perjudican a las empresas que trabajan para la defensa y la economía del país. Subraya que sus empresas son estratégicas para la defensa y la economía y sólo en 2023 pagaron 442 millones de grivnas en impuestos.
Por su parte, el fiscal Shapovalov y el policía Nikonenko aún no se han pronunciado sobre la situación. Seguimos siguiendo el desarrollo de los acontecimientos en este caso de alto perfil.