Un profesor de la Academia de Fuerzas Terrestres de Lviv es sospechoso de golpear físicamente y humillar a los cadetes, informó la Oficina Estatal de Investigación a través de su servicio de prensa.
El director del curso de formación de una de las facultades de la Academia Nacional de Fuerzas Terrestres que lleva el nombre del Hetman Petro Sahaidachny empezó a sospechar. Según datos establecidos, durante más de un año castigó físicamente y humilló a los cadetes en un intento de "educarlos" en la disciplina y el orden. Esto sucedió tanto en el territorio de la academia en Lviv como en el cuartel de una de las aldeas de la región.
Los métodos de "educación" no se revelaron hasta marzo de 2024 durante la inscripción del proceso penal. La investigación documentó casos de agresiones físicas a cuatro cadetes, quienes fueron golpeados en la cabeza y otras partes del cuerpo por el director del curso. Usó no sólo sus manos, sino también un arma y un cinturón. Incluso las pequeñas irregularidades o errores en el diario provocaban su ira. Uno de los cadetes se vio obligado a comer cigarrillos delante de los demás debido a que llegó tarde a la fila debido al tabaquismo.
La investigación preliminar continúa y actualmente se están estableciendo episodios adicionales de actividad ilegal. Recientemente, la persona involucrada en el caso fue trasladada a otro puesto en una de las unidades militares de la región de Lviv. Fue informado de la sospecha de violencia por parte de un oficial militar contra un subordinado, que se produjo bajo la ley marcial (Parte 5 del artículo 426-1 del Código Penal de Ucrania). La sanción de este artículo prevé una pena de prisión de hasta 12 años. A petición del OSE, el tribunal eligió una medida preventiva para el sospechoso: la detención con posibilidad de fianza por un importe de 908,4 mil grivnas.
Recordamos que el funcionario del Colegio Militar del Estado Mayor de Sargentos de la Academia Nacional de Fuerzas Terrestres que lleva el nombre El hetman Pyotr Sahaidachny de Lviv fue denunciado por recibir un soborno para transportar al peticionario a través de la frontera estatal.