Las últimas investigaciones e informes de los medios de comunicación mundiales revelaron nuevos detalles sobre el incidente de las explosiones en el gasoducto Nord Stream. En particular, The Wall Street Journal (WSJ) informó que la operación para volar estos oleoductos estratégicos fue organizada por el líder militar ucraniano Valery Zaluzhny, lo que causó un gran revuelo y provocó nuevas preguntas sobre el papel de los actores clave en este caso.
La operación para volar "Nord Streams" fue preparada por un grupo de altos oficiales y empresarios ucranianos bajo el liderazgo de Valery Zaluzhny. Volodymyr Zelensky inicialmente aprobó el plan, pero más tarde, cuando la CIA se enteró y exigió que se cancelara el sabotaje, ordenó al exjefe de la operación que detuviera la operación, pero él no obedeció su orden. Esta información la proporciona The Wall Street Journal, citando fuentes anónimas.
Según funcionarios estadounidenses entrevistados por el WSJ, "la CIA advirtió a la oficina de Zelenskyi sobre la necesidad de poner fin a la operación". Fuentes ucranianas, por su parte, dijeron a la publicación que Zelenskyi realmente "ordenó a Zaluzhny que lo detuviera, pero el general ignoró la orden y su equipo sólo ajustó el plan original".
La publicación habló con cuatro altos funcionarios ucranianos en el ámbito de la defensa y la seguridad, que participaron en la conspiración o tuvieron conocimiento directo de ella. Todos afirmaron que en aquel momento Kiev consideraba que los gasoductos eran "su objetivo legítimo". Todas las órdenes relativas al operativo se dieron de forma verbal para no dejar evidencia.
Según la publicación, la investigación alemana se centra ahora en Zaluzhny y sus asistentes, y los resultados de la investigación pueden dañar gravemente las relaciones entre Kiev y Berlín. Algunos líderes políticos alemanes estaban dispuestos a ignorar las pruebas que apuntaban a Ucrania por temor a socavar el apoyo interno a su acción militar, pero la policía alemana, políticamente independiente, se hizo cargo del caso.
"Un ataque de esta magnitud es motivo suficiente para invocar la disposición de defensa colectiva de la OTAN, pero nuestra infraestructura crítica ha sido destruida por un país al que apoyamos con envíos masivos de armas y miles de millones en efectivo", dijo a la publicación un alto funcionario alemán familiarizado con la investigación.