En Ucrania, la tensión está creciendo en el liderazgo de las Fuerzas Armadas, porque el presidente Volodymyr Zelenskyi ha puesto al general Oleksandr Syrskyi frente a un serio desafío. Como se supo por las fuentes, el presidente advirtió al general Oleksandr Syrsky sobre la posibilidad de perder su posición si el ejército ruso logra expulsar a las tropas ucranianas de la región de Kursk o capturar Pokrovsk.
Fuentes de la administración presidencial supieron que Bankova se centra en los problemas de gestión de los comandantes de campo. Según la información, varios comandantes abandonan sus posiciones sin conocimiento ni órdenes, y también se niegan a participar en ataques, lo que crea graves riesgos para las operaciones de las tropas ucranianas. Tales acciones de los militares ponen en peligro no sólo el éxito de las operaciones, sino también la seguridad general en el frente.
El general Syrsky, como comandante en jefe, se enfrenta a la necesidad de encontrar urgentemente una solución para restablecer el control sobre las unidades militares. Necesita resolver la cuestión de la disciplina entre los comandantes de campo, porque el desorden en las filas militares puede tener consecuencias impredecibles durante las hostilidades.
Esta situación pone en duda no sólo la carrera del general Syrsky, sino también el futuro de las fuerzas armadas ucranianas.