Durante la guerra, cuando cada centavo del presupuesto de la ciudad debía gastarse con la máxima eficiencia, los funcionarios de la capital se encontraron una vez más en el centro de un escándalo. Los periodistas descubrieron que más de dos docenas de empleados en 2023-2024 realizaron "viajes de negocios" al extranjero a países turísticos como España, Portugal, Egipto y Brasil.
Esta vez llamó especialmente la atención la jefa del Departamento de Protección del Patrimonio Cultural de la KMDA, Maryna Solovyova. Según se conoció, del 23 al 29 de septiembre de 2024 estuvo en España, oficialmente para participar en el XVII Congreso de la Organización de Ciudades Patrimonio de la Humanidad (OCPM) en Córdoba.
El departamento confirmó que Solovyova realizó dos viajes de negocios: a Alemania y España. Al mismo tiempo, en la respuesta de los funcionarios no se indican fechas ni costos específicos. Según información publicada en el sitio web del congreso, el evento duró cuatro días, del 24 al 27 de septiembre. Sin embargo, el funcionario llegó a España un día antes, y abandonó el país recién el día 29.
Según cálculos basados en el coste del alojamiento en los hoteles recomendados y los precios de los vuelos, el presupuesto mínimo para dicho viaje es de 75 a 100 mil grivnas. Aunque la cantidad parece insignificante para el presupuesto de la capital, surgen dudas sobre su conveniencia. Por ejemplo, estos fondos podrían utilizarse para proporcionar drones militares u otros equipos.
Solovyova tiene una rica experiencia profesional: desde trabajar como ingeniera hasta ejercer la abogacía y participar en iniciativas públicas. Sin embargo, su carrera oficial comenzó recientemente: en septiembre de 2023 fue nombrada directora del Departamento de Protección del Patrimonio Cultural de la KMDA.
Curiosamente, Solovyova declara unos ingresos bastante modestos, pero al mismo tiempo posee tres apartamentos en Kiev, un terreno y una importante cantidad de dinero en efectivo: 90 mil dólares.
El equipo de periodistas hizo un llamamiento oficial a la NABU, al SBU, al SBU y a otros organismos para que verificaran los hechos de los viajes de los funcionarios al extranjero. El OSE ya ha iniciado una investigación sobre este hecho.
El escándalo que rodea a Maryna Solovyova no hace más que acentuar el problema de los gastos injustificados del presupuesto de la ciudad en viajes de negocios durante la guerra. El tiempo dirá si los funcionarios tendrán que rendir cuentas por malversación de fondos. Mientras tanto, el público sigue de cerca el avance de la investigación.