El Instituto Ucraniano de la Memoria Nacional (UINP) no recibió solicitudes oficiales de la parte polaca para permitir la exhumación de los cuerpos de las víctimas de la tragedia de Volyn. Así lo anunció el director del instituto, Anton Drobovich, en una entrevista con Radio Liberty. Según él, Ucrania está dispuesta a considerar la posibilidad de realizar trabajos de búsqueda y exhumación, pero todavía no se ha recibido ninguna solicitud específica de Polonia.
"Hace dos semanas envié una carta al Ministerio polaco de Cultura y al Instituto Polaco de la Memoria Nacional preguntando dónde exactamente se necesitan trabajos de búsqueda o exhumación. Sin embargo, todavía no ha habido una respuesta oficial", afirmó Drobovich.
El titular de la UINP agregó que si bien el instituto recibió una solicitud de un ciudadano polaco, esta solicitud será incluida en el plan de trabajo para 2025, incluso en ausencia de solicitudes oficiales a nivel estatal. Drobovych también mencionó que Polonia no cumplió los acuerdos anteriores sobre la creación de un grupo de trabajo conjunto para coordinar los trabajos de búsqueda y exhumación.
Además, el director del instituto destacó la importancia de respetar el acuerdo entre Ucrania y Polonia de 1994 y mencionó los casos de vandalismo contra tumbas ucranianas en Polonia. En particular, subrayó que la fosa común de los soldados del ejército insurgente ucraniano (UPA) en el monte Monastir sigue destruida.
"Es una situación absurda, ni siquiera los políticos polacos entienden por qué todavía no se ha restablecido la tumba legal", afirmó Drobovich.
Las autoridades ucranianas ya han dado permiso para iniciar operaciones de búsqueda de las tumbas de los polacos que murieron durante el ataque de la UPA en febrero de 1945 en la ciudad de Puzniki en Podilly. Sin embargo, para dar nuevos pasos en esta dirección será necesaria una solicitud oficial de Polonia.
Anteriormente, el ministro polaco de Defensa Nacional, Władysław Kosiniak-Kamysh, señaló que resolver la cuestión de la tragedia de Volyn en 1943 es una condición para la adhesión de Ucrania a la Unión Europea. Sin embargo, el presidente polaco, Andrzej Duda, criticó esta declaración y destacó la importancia de desarrollar las relaciones polaco-ucranianas.