A pesar de que la temporada de calefacción en Ucrania comenzó en octubre, a principios de diciembre el problema del suministro de calor sigue siendo relevante para muchas regiones. En particular, el 9% de los edificios residenciales y el 6% de las instalaciones de importancia social, como hospitales, escuelas y guarderías, siguen sin calefacción.
Según la Inspección Estatal de Energía, al 22 de noviembre, el 84% de las plantas de calderas estaban en funcionamiento en Ucrania. Solo 12 regiones han logrado conectarse completamente a la calefacción, mientras que en las regiones restantes el proceso continúa bajo el control de las autoridades locales.
A pesar de los avances en la conectividad, varios asentamientos enfrentan desafíos importantes. La situación más difícil se registra en:
- En Krivói Rog : 934 edificios residenciales, 11 instituciones médicas (en particular, el hospital municipal núm. 16), 43 instituciones educativas y el centro territorial de protección social permanecen sin calefacción.
- Pokrovsk (región de Donetsk) y Slobozhanskyi (región de Kharkiv), donde todavía es imposible garantizar un suministro estable de calor debido a la destrucción de infraestructuras críticas y amenazas a la seguridad.
En las zonas situadas cerca de la línea del frente, la situación se complica por los constantes bombardeos, la destrucción de las salas de calderas y las redes de calefacción. La restauración del suministro de calor aquí requiere importantes recursos y medidas de seguridad adicionales.
El Ministerio de Desarrollo Comunitario y Territorial enfatizó la importancia de solucionar oportunamente los problemas con el calor.
"Todas las partes responsables deberían actuar lo más eficientemente posible para resolver el problema lo antes posible. La interrupción de la temporada de calefacción es inaceptable, porque de ello dependen la vida y la salud de decenas de miles de personas", afirmó el ministerio.
¿Que sigue?
Para solucionar el problema de la calefacción, el gobierno y las autoridades locales están centrando sus esfuerzos en:
- Aceleración de la puesta en marcha de plantas de calderas.
- Eliminación de daños a redes térmicas.
- Provisión de calefacción alternativa para los residentes de las zonas de primera línea.
A pesar de las dificultades, la situación está mejorando en muchas regiones. Sin embargo, una gran parte de los ucranianos todavía esperan que llegue el calor, esperando que el invierno no se convierta en una prueba adicional para ellos.