La noche del 30 de septiembre, un dron ruso impactó un edificio residencial en la aldea de Chernechchyna, en la comunidad de Krasnopil, región de Sumy. Una familia con dos niños pequeños, de 6 y 4 años, vivía en el apartamento. Los cuatro murieron.
La tragedia fue reportada por el jefe de la Administración Militar Regional de Sumy, Oleg Hrygorov. Confirmó que los rescatistas del Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania recuperaron de entre los escombros los cuerpos de los padres y sus hijos nacidos en 2018 y 2021.
"Esta es una pérdida terrible e irreparable para toda la comunidad y la región. La muerte de una familia en Chernechchyna es una tragedia que jamás olvidaremos ni perdonaremos", declaró Grigorov.
El Servicio Estatal de Emergencias también informó que el ataque del dron dañó edificios residenciales de uno y dos pisos.
Esa misma noche, la región de Kiev también fue atacada con drones. En el distrito de Brovary, una mujer nacida en 1950 resultó herida: sufrió una crisis hipertensiva y una reacción de estrés agudo. Los médicos la atendieron en el lugar.
Según la OVA de Kyiv, no se registraron daños en infraestructuras críticas, pero sí en un edificio residencial privado, dependencias y un automóvil.