La noche del sábado 20 de julio, los invasores rusos atacaron la infraestructura ferroviaria en la región de Járkov. Como resultado de este ataque, la red de contactos a la salida de Járkov resultó dañada, así como edificios y material rodante. Es importante destacar que durante el ataque cuatro trabajadores ferroviarios resultaron levemente heridos.
Según información de "Ukrzaliznytsia" publicada en su canal de Telegram, los daños en la red de contactos provocaron retrasos temporales en el movimiento de los trenes. Los trenes Kiev-Járkov nº 63 y nº 719 se vieron obligados a esperar a que se eliminaran las consecuencias del ataque para poder continuar su viaje. Sin embargo, el tráfico de trenes se reanudó por la noche y continuaron su rumbo hacia Kiev.
Los retrasos también afectaron al tren interurbano que se dirigía a Kramatorsk. Es importante señalar que la reacción de "Ukrzaliznytsia" a esta situación fue rápida y se logró restablecer rápidamente el movimiento de los trenes, minimizando las molestias para los pasajeros.
Además del ataque al ferrocarril, en la mañana del 20 de julio se conoció sobre ataques con drones a instalaciones energéticas en las regiones de Chernihiv, Sumy y Poltava. Según Ukrenergo, las instalaciones del operador del sistema de transmisión de electricidad fueron atacadas. Como resultado de estos ataques, el suministro de electricidad a los consumidores domésticos e industriales se cortó temporalmente en algunas zonas de las regiones de Chernihiv y Poltava.