Según el portal Business Insider, los tanques estadounidenses Abrams demostraron ser insuficientemente efectivos en las condiciones del conflicto en Ucrania. Las fuerzas rusas, utilizando una variedad de estrategias y armas, pudieron contrarrestar eficazmente estos vehículos blindados de "alta tecnología", lo que resultó en pérdidas significativas entre el equipo.
En una entrevista con la publicación, un operador de tanque de las Fuerzas Armadas de Ucrania con el distintivo de llamada "Zakon" admitió que los drones rusos siguen siendo una "gran amenaza" para "Abrams". Los vehículos blindados no están protegidos de los golpes ni siquiera mediante los dispositivos de guerra electrónica instalados en ellos.
Sin embargo, según el ucraniano, los vehículos aéreos no tripulados no son el único peligro al que se enfrentan los vehículos blindados estadounidenses. Los "Abrams" son un "blanco fácil" para las armas que se utilizan a menudo en combate, en particular para los misiles antitanques y los lanzacohetes.
"Law" señaló que "Abrams" son capaces de "resistir un golpe".
Al mismo tiempo, destacó que los tanques necesitan urgentemente una mayor protección, en particular los sistemas dinámicos como el ARAT-1 o el análogo soviético "Kontakt-1".
Otro problema es el número de coches. Estados Unidos entregó sólo 31 Abrams al ejército estadounidense, de los cuales al menos diez ya han sido destruidos, por lo que no pueden usarse como tanques de avance, sino que desempeñan un papel auxiliar para apoyar y fortalecer las posiciones defensivas, señala Business Insider.